Dos buenas poesías de Gerardo Diego

Dos buenas poesías de Gerardo Diego

Cuando un poeta es tan versátil y virtuoso, a algunos nos levanta de la silla.

Tal dominio de estilos y temas es de lo más intrigante…

¡No hay rival en el dominio del soneto! Cuéntame abajo en los comentarios qué te parece 😉 .

De su boca nació esta buenísima reflexión:

«Yo no soy responsable de que me atraigan simultáneamente el campo y la ciudad, la tradición y el futuro; de que me encante el arte nuevo y me extasíe el antiguo; de que me vuelva loco la retórica hecha y me torne más loco el capricho de volver a hacérmela – nueva- para mi uso personal e intransferible»

¿Soberbio verdad?

Aunque reconozco que no soy amante de gran parte de su obra, como en todos los poetas, si escarbamos lo suficiente, acabamos encontramos alguna joya…

Basta con eso para que me enganche.

Hoy quiero compartir contigo dos buenas poesías, para que estés donde estés, puedas sentir conmigo su nivel de belleza

Puede que estés en casa descansando, paseando, de vacaciones o trabajando, sea donde sea disfrútalo mucho.

Sucesiva, de Alondra de Verdad

DÉJAME acariciarte lentamente,

déjame lentamente comprobarte,

ver que eres de verdad, un continuarte

de ti misma a ti misma extensamente.

 

Onda tras onda irradian tu frente

y, mansamente, apenas sin rizarte,

rompen sus diez espumas al besarte,

de tus pies en la playa adolescente.

 

Así te quiero, fluida y sucesiva,

manantial tú de ti, agua furtiva,

música para el tacto perezosa.

 

Así te quiero, en límites pequeños,

aquí y allá, fragmentos, lirio, rosa,

y tu unidad después, luz de mis sueños.

 

 

En Mitad de un Verso, de Cementerio Civil.

Murió en mitad de un verso,

cantándole, floreciéndole,

y quedó el verso abierto, disponible

para la eternidad,

mecido por la brisa,

la brisa que jamás concluye,

verso sin terminar, poeta eterno.

 

Quién se muriera así

al aire de una sílaba.

 

Y al conocer esa muerte de poeta,

recordé otra de mis oraciones.

«Quiero vivir, morir, siempre cantando

y no quiero saber por qué ni cuándo.»

Sí, en el seno del verso,

que le concluya y me concluya Dios.


Espero que estas dos buenas poesías con las que me topé cierto día, te hayan hecho vibrar durante un ratito.

A mí, cuando las descubrí, me dejaron bastante emocionada y perpleja. Es lo que tiene la poesía, una capacidad increíble de transformarnos y de cambiar nuestra mirada hacia el mundo. Renovarnos y sentirnos de nuevo.

Y para continuar con bonitas sensaciones, te dejo por aquí un post que sin duda te va a gustar mucho también, y es que el poema de los Hippies no tiene desperdicio tampoco…

Si quieres hacer sentir lo mismo a alguien, compártelo por las redes sociales y que se extienda como la magia o como la pólvora 😉 .

¡La poesía es vida!

Hasta pronto.

Acerca de Sonia Molinero Martín

Escritora, Redactora Digital y Consultora Literaria. Siempre he querido empezar con este viaje, mi pasión crónica por escribir es la que me trajo hasta aquí y ya no pienso bajarme de este tren...
¿Subes conmigo?

Speak Your Mind

  Acepto la Politica de Privacidad (Requerido)

Los Datos de tus comentarios estan Seguros:

  • Responsable: Sonia Molinero Martin
  • Finalidad: Gestionar y moderar los comentarios.
  • Legitimacion: Tu consentimiento.
  • Destinatarios: Los datos que nos facilitas estaran ubicados en los servidores de Webempresa (nuesto hosting) dentro de la UE. Puedes ver su politica de privacidad en (https://www.webempresa.com/aviso-legal.html).
  • Derechos: Podras ejercer tus derechos, entre otros, a acceder, rectificar, limitar y suprimir tus datos si lo deseas.
  • Contacto: sube@eltrendelamusa.com.
  • -------------------

    *