¿Cómo hacer una introducción de un libro?

Cuando tenemos intención de escribir un libro solemos pensar muy rápido en la introducción.

Por lo menos a mí es lo que me ha pasado, no sé si seré la única…

Apenas he tenido escritos tres capítulos y ya he estado pensando en la posible forma de comenzar con el libro. Incluso empiezo a esbozarla de forma inconsciente.

Y es que siempre me ha llamado mucho la atención en qué forma empieza y ha sido clave para leerlo o no.

Es algo que a mi juicio es bastante importante ya que ayudará al lector a situarse frente a la historia, se hará una idea de qué va a encontrarse dentro.

Te cuento mi experiencia. Yo soy de las que además de leer la contraportada y el primer párrafo (ya hablaremos de esto en otro momento), comienzo con la introducción del libro para ver qué voy a encontrarme. Ahí ya sé automáticamente, y pocas veces me equivoco, si va a ser un buen libro para mi o no; en cuyo caso, inmediatamente lo suelto en la estantería y voy a buscar otro.

También me pasa cuando compro online, como ya sabrás en sitios como amazon puedes leer algunas páginas del libro además de la sinopsis.

¡Pero vamos ya con el post!, entremos en materia: si quieres saber cómo hacer una buena introducción de un libro quédate conmigo que seguro que te resultará interesante todo lo que comparto.

¿Qué es una introducción de un libro?

La introducción de un libro es lo que escribimos al principio del todo, la parte inicial del conjunto del texto.

Con ella le damos un contexto claro a la historia, reflexionamos sobre ésta, explicamos o resumimos un poco lo que el lector va a descubrir en la obra.

Con la introducción se enterará de los pormenores del relato, la biografía, etc.. se podrá  hacer una idea general de lo que va.

Da igual el tipo de libro que sea, una buena introducción siempre debe de aclarar, y sobre todo, atrapar al que lo lea de manera inmediata.

Aunque tienen el mismo sentido, no debes confundir un prólogo o prefacio con la introducción de un libro. El primero lo puede escribir también otra persona.

¿Cómo hacer una introducción de un libro que enganche?

Todos los escritores queremos tener esa sensación al escribirla, la sensación de leer la introducción de un libro y decir ¡guau! ¡quiero leerle ya!, de principio a fin.

Contar lo justito, lo que nos interese,  y enganchar, esa es la clave.

También es importante saber qué callar y dejar que el lector vaya descubriendo poco a poco toda la trama.

Si por ejemplo se trata de la introducción a una novela histórica puedes optar por sumergir al lector en la época en la que suceda. Hablarle un poquito sobre lo que rodea a la historia en sí, lugares, costumbres, etc… pero de una forma muy generalizada. Sin olvidar ese Clik que el lector debe sentir y que le abra la puerta de la curiosidad de par en par.

Pero sobre todo tienes que intentar hacerlo de una forma creativa, pon especial atención a esto. Si el lector se aburre ahí, estás perdido jejeje.

Reflexiono sobre algunas cosas similares en un post de si son necesarios los cursos de escritura, quizás te pueda inspirar desde ahí si tienes alguna dificultad 😉 .

Veo muy interesante dedicarle todo el tiempo que puedas a escribirla. No importa lo que tardes, es de vital importancia que quede perfecta, ¡impecable!

Que la leas una y otra vez y no te canses. Que culmine con contundencia y deje la miel en los labios.

Recuerda que es tu carta de presentación, la primera impresión que va a tener el lector de ti con lo que no escatimes en esfuerzos.

Después, te recomiendo que tengas en cuenta aquellas cosas que a ti te hayan enganchado de una obra.

Por ejemplo, si hay alguna introducción de un libro que hayas tenido la necesidad imperiosa de comenzar a leer en ese mismo instante.

A mí si me ha pasado, y no una ni dos veces 🙂 .

Recuerdo perfectamente cuáles son los casos en los que me ha pasado ésto. Cuando el autor ha incluido alguna cita célebre, frase o pensamiento de algún grande. O con alguna anécdota chocante o divertida…

En estos casos «obligamos» al lector a que se pregunte ciertas cosas como por qué hemos escogido esta u otra cosa así para empezar con nuestro libro.

Es vital transmitir de forma contundente, con seguridad y confianza. Ya sea caos, sosiego, desconcierto, miedo, diversión, paz o romance… pero siempre que infunda al lector más curiosidad y ganas. No sé si me explico, pero a la hora de elegir la introducción para tu libro, la definitiva, me parece muy importante. Por eso muchos recomiendan no escribirla hasta tener finalizado todo el texto. Pero vaya, a mi eso me parece imposible, ya que me pueden las ganas siempre…

Lo que sí que hago en la mayoría de los casos es reescribirla varias veces, es la forma en la que siempre va cambiando el libro, al igual que voy cambiando yo. Eso ya va a tu elección, cada uno como más cómodo se sienta. Siempre puedes volver a ella y retocarla como digo, reescribirla o cambiarla por completo si te apetece, ¡es escritor tiene siempre el poder!

Pero antes de continuar leyendo…

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Y ahora sí, continuamos con los ejemplos para poder inspirarte y echarte una mano con la introducción de tu libro.

No olvides que siempre puedes contar conmigo en el área de comentarios u también desde YouTube y por el menú de contacto.

Ejemplos de introducción de un libro

No quería acabar el artículo si dejarte un poco de ayuda, algunos ejemplos que he creado para que te hagas una idea de alguna que otra introducción de un libro ficticio.

No están completas, son solo el principio, para que tú puedas continuarlas y encauzarlas a tu conveniencia.

Son inventadas, de creación propia, así que puedes usarlas como quieras si te vinieran bien 😉 .

Si el libro es biográfico y vas a compartir tu experiencia acerca de algo de lo que entiendes, para incluso ayudar a otra persona, podría comenzar así:

«El libro que ahora mismo tienes en tus manos es un fiel reflejo de mi día a día, de cómo he ido superando los obstáculos. Ha sido algo necesario, he tenido que escribirlo y plasmarlo en papel porque sentía que podía ayudarte, qué necesitabas de estas palabras para tus propios objetivos. Es posible que éstos sean los mismos, que siempre hayamos compartido esa misma mirada que quiere superar ese horizonte desdibujado que se ve al fondo de las cosas difíciles de creer. O de conseguir. Pero quería asegurarme de que sepas y tengas clarísimo que sí que se puede, que es una meta real a la que con un poquito de esfuerzo se llega, y se supera con la cabeza bien alta….»

Otros ejemplos de introducción de un libro biográfico que se me ocurre sería:

«Este libro es una potencial herramienta para tu futuro, recoge mi pasado con detalles que jamás habría esperado compartir. Pero ha ocurrido algo en mi camino, crecí. Pensé que si empezaba a ver las cosas de otra manera conseguiría ser más positivo y aprovechar las circunstancias. Reunir todas mis experiencias, las positivas y las negativas, era la idea. Plasmarlas en este libro era el sueño. Y así lograr transmitirlo para tu beneficio, ya que puedes valerte de estas vivencias que hoy comparto contigo. Acógelas, siéntelas como tuyas, porque bien podrían serlo. La vida me ha enseñado a que todos los seres humanos tendemos a tropezar con las mismas piedras, a llorar por las mismos sucesos, a alegrarlos por las mismas pruebas superadas…»

«A ti lector, que como yo, has vivido la mala suerte de ser abandonado. Por una mujer que nada no ha tenido ninguna consideración contigo. Que ha ocultado cosas, que ha mentido contra viento y marea y que ha desdeñado todo lo que yo le entregué. Quizás temas leer esta historia por sentirte demasiado identificado con mi biografía, pero necesitaba compartirlo. El desamor es lo que tiene, es como un cuchillo que se clava en el corazón, para no salir, para no hacerlo nunca y taponar una herida que jamás sana»

Si lo que escribes es una novela y quieres enganchar al lector desde el principio puedes comenzar así:

«Esta historia no es una historia corriente. Es algo más que lo que le ocurre a una mujer joven con aspiraciones en pleno siglo XXI. Todos tenemos sueños por cumplir pero no todos somos capaces de lanzarnos al vacío para conseguirlos. Ella sí lo hizo y esta historia le pertenece enteramente a ella por ser una protagonista con tanta magia, con tanta realidad como para no dejarme dormir hasta plasmarla en papel. Su belleza interior me conquistó, pasó de la ficción a materialidad en tan poco tiempo que yo mismo quedé sorprendido… Tenía mucha prisa en salir…»

Otros ejemplos de introducción de un libro que sea una novela que se me ocurre compartir contigo sería:

«Todos los personajes que aparecen en esta novela ocultan algo. No son creaciones al azar soñadas alrededor de un arquetipo concreto, tampoco dibujadas en base a unas personalidades predefinidas. Verás que te parecerá que las conoces desde siempre, que están en tu vida y en tu día a día cotidiano…»

«Aquí empezó todo, en esta ciudad sin ley. Un lugar donde cada rincón esconde algo complicado, oscuro y tenebroso. Allá donde mires hay terror, hay miedo por ser descubierto. ¿Acaso te atreverías a vagar por ella? ¿quizás el reto más importante de todos los tiempos no sea nada para ti? Me temo que no sabes lo que esconde…»

La introducción de un libro es clave, pero es más importante el contenido

Escribir un libro no es sencillo, o al menos hacerlo bien.

Yo no tengo la clave para que publiques un betseller, pero sí sé cómo debe de estar: perfectamente narrado.

Por ello veo crucial que todos prestemos especial atención a ciertas pautas importantes: nuestra ortografía, la sintaxis y sobre todo, que sea comprensible para nuestros lectores.

Si nuestra introducción no engancha, todavía podemos tener posibilidades, ¡claro está! Pero ni nuestro libro no llega del todo al lector, estamos perdidos.

Si eres un gran lector o lectora como lo soy yo, sabrás por experiencia de qué te estoy hablando en este último punto del post, ¿verdad? ¿Cuántas veces has dejado un libro sin terminar porque no hay manera de entenderlo? ¿Porque te aburre soberanamente? O peor, porque no entiendes nada, es denso e infumable…

Para publicar mi primer libro tuve que pasar por varias fases tediosas que me quitaron el sueño en más de una ocasión.

¡Ojala hubiera tenido apoyo en aquellos momentos!, pero ya pasó, por fin lo hice y ya está disponible en Amazon para todo el mundo.

Si tu caso es el de un escritor o escritora independiente que se siente un poco perdido o abrumado (como me pasó a mí) por tanta información confusa en internet, te tiendo mi mano a través de mis servicios literarios. Cotillea, conóceme, echa un vistazo o tómate tan solo un café conmigo desde ahí, sin ningún compromiso 😉 .

Nuestro camino hacia la autopublicación no es sencillo, mejor si lo hacemos acompañados 😉 . Cuéntame por abajo en los comentarios qué te parece todo esto que voy compartiendo por el blog, estaré encantada de leerte.

¡Y hasta aquí por hoy! Espero que estas pequeños pequeños consejos te sirvan de ayuda, o de mínima inspiración, esa es mi intención más sincera.

Por otro lado, soy consciente de que es complicado acertar del todo con estos ejemplos que hoy comparto, que es algo muy personal que debe de salir de dentro del autor. Pero también se que muchas veces los escritores nos bloqueamos sin remedio y es complejo salir de ese atolladero 😉 . ¡Me conformo con inspirarte!

Prometo volver al post más adelante e ir incluyendo más y más ejemplos de introducción de un libro que seguro estás deseando escribir o acabar, no sé cual es tu caso.

También quiero dejarte por aquí por si te sirviera un post que escribí de cómo hacer un prólogo de un libro, ¡espero que también te ayude!

Como te decía, si quieres puedes contarme por aquí abajo en el área de comentarios, estaré encantada si eliges compartir tu experiencia conmigo 😉 .

¿Te ha servido de ayuda mi post? Pues siempre puedes…

¡Me encantan estos detalles!